El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, dio las más profundas condolencias al gobierno y pueblo de Mali, en especial a los familiares y amigos de las víctimas causadas por el derrumbe de una mina de oro.
«Lamentamos profundamente las pérdidas de vidas humanas», fue el encabezamiento del mensaje trasmitido en su cuenta en X por el también miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba.
La nota del canciller cubano va más allá de una condolencia formal, una vez que refleja más de 60 años de relaciones amistosas con esa nación del África Occidental, que a lo largo del tiempo ha sostenido una postura de valiente denuncia del criminal bloqueo económico impuesto por los Estados Unidos.
De acuerdo con informaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, con Mali se han consolidado importantes logros en materia de concertación política, y en disímiles campos de interés recíproco, lo cual ha permitido el fomento de las relaciones de cooperación y amistad entre los dos países.
Cuba ha preparando a jóvenes en la carrera de medicina y sus especialidades a través del otorgamiento de becas para estudiar en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) y en otros centros e instituciones docentes del Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
UN LAMENTABLE SUCESO
De acuerdo con www.swissinfo.ch, la mina colapsada se ubica en la localidad de Kobada, a unos 250 kilómetros al sur de Bamako, la capital del país, y ha dejado unos 60 muertos, entre ellos varios jóvenes.
Ese sitio digital, al tomar como referencia información de EFE, asevera que el yacimiento estaba cerrado oficialmente desde el pasado verano.
De acuerdo con la nota, fuentes locales aseveraron que el cierre se produjo con el inicio de la temporada de lluvias (entre junio y agosto), meses en los que se suele clausurar cada año por riesgo para los mineros.
Las mismas personas aclararon que el gobierno maliense no dio instrucciones para volver a abrirla, pero los mineros lo hicieron de manera irregular y la estaban explotando por su cuenta.