Es muy importante que todos comprendamos que las proyecciones del Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía durante este año marcan un antes y un después, que no es seguir haciendo más de lo mismo, sino hacer cosas diferentes y transformar para comenzar a revertir la situación actual, aseguró el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, al dirigir la más reciente reunión con los gobernadores y el intendente del municipio especial Isla de la Juventud.
Durante el encuentro –realizado en el Palacio de la Revolución– se presentaron los aseguramientos a la implementación en los territorios de las nuevas decisiones anunciadas en diciembre último en el Parlamento, porque el municipio no está desconectado de estas, sino que constituye un actor fundamental para su ejecución y, por tanto, exige el perfeccionamiento de la gestión de gobierno a ese nivel, como se dijo en la reunión.
Al respecto, Marrero Cruz subrayó que urge identificar los errores propios, así como fortalecer la comunicación permanente con el pueblo y los trabajadores para que realmente las medidas tengan un impacto de cambio en el escenario del país. «No tenemos por qué esperar a que nos digan “de arriba” lo que tenemos que hacer; este es un proceso en el que queremos rectificar las cosas mal hechas, es decir, las distorsiones», apuntó.
Durante la reunión, se ratificó que, como parte de las medidas, una de las acciones principales es avanzar en la transformación integral de la empresa estatal socialista. Sobre ello, el Primer Ministro insistió en revisar todas las estructuras del sistema empresarial, para dotarlas de mayor dinamismo y eliminar trabas con el propósito de lograr transformaciones en el ámbito productivo y de los servicios, a partir de recursos endógenos.
LA VIVIENDA EN LA MIRA
Otro de los temas abordados durante el encuentro –en el cual participó el miembro del Buró Político Esteban
Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado–, fue el plan de la vivienda para el presente año, el cual prevé la terminación de alrededor de 16 300 inmuebles, teniendo muy presente la ruralidad, las madres con tres o más hijos y las células básicas habitacionales.
Tras los análisis, el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, vice primer ministro de la República, dejó claro que, si no hay materiales de la construcción, no hay viviendas, y existen posibilidades que no se están explotando. «No se ha tomado con la fuerza que requiere el cambio, el giro de pensamiento y de acción para poder lograr con los recursos locales, como está previsto en la política de la vivienda, que se pueda implementar el programa».
Al reiterar que esta continúa siendo una tarea de alta prioridad en el trabajo del Gobierno, Marrero Cruz ponderó la urgencia de aprovechar las potencialidades locales y generar un movimiento popular en los municipios que permita impulsarla. «El escenario va a mantenerse, las mismas limitaciones y, por tanto, es imperdonable que nos sentemos a esperar, sin primero explotar todo lo que depende de nosotros mismos.
«La vida ha demostrado que en este asunto de la vivienda hay muchísimas cosas que se pudieran hacer y no las estamos haciendo», insistió el Primer Ministro, quien hizo énfasis en reforzar el control de los recursos y enfrentar cualquier manifestación de delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales.
Precisamente, en la reunión, Alexis Lorente Jiménez, gobernador de Sancti Spíritus, explicó sobre un hecho detectado en Fomento, donde se informaron viviendas terminadas por esfuerzo propio que cuando se hizo el análisis y se visitaron, había desde personas fallecidas hasta casas que nunca existieron. Al respecto, el general de división Raúl Omar Acosta Gregorich, presidente del Instituto Nacional de Ordenamiento Territorial y Urbanismo, informó que se trabaja en la investigación del hecho, de conjunto con el Ministerio del Interior.
LOS ALIMENTOS DEL PUEBLO
También formó parte de la agenda del encuentro el estado actual del balance municipal de alimentos para satisfacer las demandas de la población. Sobre ello, Lazo Hernández reiteró que es un tema que involucra a todos, en particular, a la base, a los municipios, e incluso más para abajo, hasta los consejos populares. «La producción de alimentos tiene que dejar de ser una consigna para todos, y debemos crear un movimiento revolucionario, a nivel de cada cubano, para acabar de resolver este problema».
Marrero Cruz señaló que persisten irregularidades en la contratación, un proceso que tiene que ser efectivo con el contrato firmado en la mano del productor; el programa de entrega de tierras para autoconsumo en los centros de trabajo no avanza significativamente, y restan más de 100 000 hectáreas por plantar para cumplir la campaña de frío.
Además, calificó a la agricultura urbana, suburbana y familiar como una fortaleza para la consolidación de los sistemas alimentarios locales, y para aglutinar a gran parte de la población en desarrollar iniciativas encaminadas al autoabastecimiento. Al convocar a incrementar el número de organopónicos, canteros, y de patios y parcelas, el Primer Ministro aseveró que las reservas y potencialidades de este movimiento no han sido suficientemente explotadas.
Un programa tan profundo, tan bien pensado, ideado por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, la manera más rápida y económica de producir alimentos en medio de la ciudad, en un solar yermo, que casi no necesita recursos, que produce y vende alimentos directamente al pueblo, que genera empleo en la propia comunidad. Sin embargo, hay municipios del país, incluyendo La Habana, que no se planificaron hacer un solo organopónico nuevo este año, señaló.
Finalmente, Marrero Cruz recalcó que la producción de alimentos debe ser la tarea número uno del sistema de trabajo del Gobernador, los intendentes y las administraciones a todos los niveles, porque «aun cuando tenemos, mayoritariamente, las producciones en manos de diferentes formas productivas no estatales, la responsabilidad con el pueblo exige tener un mayor control en lo que hacemos».