«A sus órdenes, Capitán», así despidió uno de los compañeros de la lucha clandestina, al capitán del Ejército Rebelde Felipe Santiago Guerra Matos, junto a familiares, combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y representantes del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder).
La ceremonia fúnebre, en el Panteón de los Veteranos de la Necrópolis de Colón, fue acompañada por ofrendas florales a nombre del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución cubana, de Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Presidente de la República, y de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC).
En el último adiós realizaron la guardia de honor, los generales de división Victor Rojas Ramos, miembro del Comité Central del PCC y jefe de la Dirección Política de las FAR, José Antonio Carrillo Gómez, presidente de la ACRC; la general de Brigada Delsa Esther (Teté) Puebla y Osvaldo Vento Montiller, presidente del Inder.
Rojas Ramos, quien pronunció el discurso de despedida, destacó la brillante hoja de servicios prestados a la Patria y elogió el legado revolucionario de «Guerrita», como cariñosamente le decían al compañero fallecido este 10 de febrero, a la edad de 96 años, a causa de una insuficiencia respiratoria aguda.
Nacido el 1ro de mayo de 1927 en Manzanillo, en la provincia de Granma, Guerra Matos comienza su labor con y para la Revolución a los 28 años de edad, formando parte del Movimineto 26 de julio. Durante toda la etapa de la guerra, se convirtió en un eficaz enlace y mensajero bajo las orientaciones del Comandante en Jefe Fidel Castro, Frank País y Celia Sánchez.
Por sus aportes a la defensa de la Patria, su trayectoria, fidelidad y actitud, le fueron otorgadas conderaciones como las medallas de combatientes de la lucha clandestina y de «La guerra de liberación», «Combatiente de la Columna No.1 José Martí», y las conmemoraciones 20, 30, 40, 50 y 60 de las FAR, entre otras.
Guerrita también acumuló méritos que lo hicieron acreedor de la condición de fundador del PCC, además de destacarse como Jefe del Estado Mayor de Cuerpo del Ejército de Camagüey y vincularse en actividades económicas e instituciones como en el Ministerio de la Construcción.